Ya estamos en el mes de noviembre, y yo ya estoy contando los días para sacar mis adornos de Navidad y empezar a decorar la casa. Este año estoy más emocionada que nunca por la Navidad, Saúl la espera con ansias, así que mamá también. Aunque bueno la verdad yo no soy de tirar la casa por la ventana para decorar, pero si me gusta ponerme festiva e ir entrando en ambiente.
Tal vez ya se han dado cuenta en mis redes sociales que en cuanto a postres yo ya estoy en modo navideño, me he adelantado un poco para tener tiempo y poderlas compartir antes de que que me vaya de vacaciones.
Tal vez ya se han dado cuenta en mis redes sociales que en cuanto a postres yo ya estoy en modo navideño, me he adelantado un poco para tener tiempo y poderlas compartir antes de que que me vaya de vacaciones.
Empecemos con la receta de hoy.
Ya les decía en el Cranberry Apple Pie que anteriormente no me gustaba nada que tuviera que ver con peras y manzanas cocidas. No sé de dónde provenía eso, tal vez mi mamá me dio demasiadas peras y manzanas cocidas cuando era bebé y quedé traumada.
Hasta hace unos años yo intentaba probar este tipo de postres y no me gustaban NADA. Afortunadamente eso ya cambio.
Hasta hace unos años yo intentaba probar este tipo de postres y no me gustaban NADA. Afortunadamente eso ya cambio.